Ha sido presentada una denuncia por «incitación al odio» contra el militante de la RKOB Johannes Wiener, de 20 años, debido a su intervención en una manifestación de solidaridad con los palestinos de la Franja de Gaza, que se celebró en Viena el 16 de noviembre pasado. Esta infracción es pasible de una pena de dos años de prisión.

Detrás de esta denuncia están, muy probablemente, las fuerzas pro-israelíes en Viena, que van de las organizaciones abiertamente sionistas de la comunidad judía hasta grupos de la periferia del Partido Comunista Austríaco, pasando por la famosa «Antinacional», las sectas cristianas, la juventud Alternativa Verde anarquizate, el «Café Crítico», Stefan Grigat, etc.

Con esta denuncia y la investigación así desencadenada por la policía política («Agencia Nacional para la protección del Estado y contra el terrorismo»), toda crítica del Estado de apartheid israelí y su represión militar, policial y jurídica del pueblo palestino, puede obstruirse en el partidor.

Al mismo tiempo, esta tentativa de criminalizar a Johannes Wiener muestra cuán peligrosa es la aprobación, por algunas corrientes oportunistas, de leyes que contemplan oficialmente a los fascistas, pero siempre fueron puestas en movimiento por los Estados burgueses contra los militantes que se reclaman de la revolución socialista.

Sin necesariamente compartir las posiciones de la RKOB, de la que el compañero Wiener es portavoz, ni el contenido de cada una de las frases del discurso que dió, pensamos que es nuestro deber evidente defender al camarada Wiener contra esta acusación. Todas las demás organizaciones del movimiento obrero deben también hacerlo, porque esta criminalización amenaza a todas las corrientes que militan contra la opresión nacional, la colonización sionista, el imperialismo y por una perspectiva socialista.

En este sentido, exigimos el levantamiento de la investigación sobre Johannes Wiener. Todas las organizaciones que se reclaman en Austria y Europa de la clase obrera tienen el deber de hacer lo mismo.